La Academia, para cumplir con el fin —recogido en sus estatutos— de velar por el buen uso de la lengua española mediante sus actividades, obras y publicaciones, se organiza en Pleno y en comisiones que se reúnen periódicamente.
El Pleno, integrado por todos los miembros de número, se ocupa de los asuntos generales relacionados con la actividad académica y la elaboración y revisión de las obras y proyectos en curso. En el desempeño de sus tareas, el Pleno cuenta con la ayuda de la Junta de Gobierno y de las distintas comisiones.
Al servicio de los trabajos que la institución desarrolla en Pleno o en comisiones, funciona el Instituto de Lexicografía, integrado por los filólogos y lexicógrafos que realizan las tareas de apoyo para la elaboración de las obras académicas.