Enrique Ramírez de Saavedra y de Cueto

Enrique Ramírez de Saavedra y de Cueto

letra d

Toma de Posesión

14 de Mayo de 1863

Fallecimiento

7 de Noviembre de 1914

Enrique Ramírez de Saavedra y de Cueto

Académico de número

La Valeta (Malta), 1828-Madrid, 1914

El 14 de mayo de 1863 tomaba posesión de su plaza de académico el escritor y político Enrique Ramírez de Saavedra y de Cueto, marqués de Auñón e hijo del escritor Ángel Saavedra, duque de Rivas. El nuevo ocupante de la silla d leyó el discurso Carácter de la verdadera poesía: «La poesía, como dice un escritor, describe una espiral en su carrera; su punto do partida es lo infinito, y su término el corazón del hombre» (p. 467).  El académico Mariano Roca de Togores, marqués de Molins, le dio la bienvenida a la RAE.

Nacido durante el destierro de su padre en La Valeta (Malta) el 13 de septiembre de 1828, a su regreso a España el joven Enrique continuó su formación en Sevilla como discípulo del poeta Alberto Lista. Licenciado en Derecho y siguiendo la estela paterna, Ramírez de Saavedra compaginó la actividad política con la literaria. Escribió numerosos artículos y poesías en periódicos y revistas y fue nombrado diputado en 1857. En 1867, cuatro años después de haber ocupado su asiento en la RAE, Isabel II le nombró senador vitalicio; en 1868, tras la Revolución de 1868 y el exilio definitivo de la reina, el marqués de Auñon la acompañó al destierro parisino, donde nacieron las dos hijas del escritor. En París entabló gran amistad con el hijo de Isabel II, el futuro rey Alfonso XII, al que acompañó en el viaje de regreso a España en 1875. Durante su reinado, Alfonso XII le nombró ministro plenipotenciario en Florencia, pero poco a poco el escritor fue alejándose de la política y se entregó de lleno a sus tareas literarias, aunque mantuvo su cargo de senador vitalicio y estuvo siempre vinculado a la corona. Además de a la RAE, perteneció a la Real Academia de Buenas Letras de Sevilla.

A pesar de estar siempre bajo la sombra literaria de su padre, algunos escritores como Juan Valera consideraron a Enrique Ramírez de Saavedra como uno de los siete mejores poetas españoles de su tiempo; su poesía, de aire romántico, fue igualmente elogiada por Emilia Pardo Bazán. Escribió el poemario Sentir y soñar (1876) y fue autor de los relatos Historias novelescas: El sueño de la vida; Morir sin Dios; La dicha en el oro; el padre Anselmo (1880) y de las leyendas de tradición romántica La leyenda de Hixem y El capitán Morgan (1879), La hija de Alimenón (1894), etc.

Enrique Ramírez de Saavedra y de Cueto murió en Madrid el 7 de noviembre de 1914, cincuenta y un años después de haber ocupado su sillón en la RAE.

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